Aitana desnuda

Aitana Ocaña, Instagram

Aitana Ocaña, Instagram

Hace un mes, Ramón Álvarez de Mon, un comentarista deportivo español, era «cazado» en una de sus video transmisiones por Twitch cuando en una de las pestañas de su navegador se podía apreciar una búsqueda en Google del texto «Aitana desnuda» . Las redes sociales se inundaron de memes, coñas y críticas hacia el comentarista por parte de sus enemigos y detractores. Muchos medios de comunicación en internet también se hicieron eco de la «cagada» de Ramón. Estoy seguro de que Ramón en el  momento en que se enteró del marrón, no pensó «Tierra trágame«, pensó «Tierra, ¡trágalos a todos!» .

El pobre Ramón tuvo que salir en Twitter y Youtube para dar explicaciones, las cuales se basaban en que hizo clic donde no debía en un artículo sobre Aitana, dentro de la web del diario Marca.

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Ramón Álvarez de Mon es Abogado y Diplomado en Empresariales, es socio del bufete Álvarez de Mon – Senante Abogados y desde hace unos pocos años compagina su trabajo con el periodismo deportivo. Trabaja como comentarista deportivo en Okdiario, Radio Marca y Gol TV entre otros. Y diariamente publica vídeos y comentarios en Youtube, Twitch y Twitter, teniendo un alto número de seguidores (actualmente 165.000 en Youtube).

En 2021, adquirió notoriedad gracias a su participación en el programa «El Chiringuito de Jugones» explicando todas las condiciones económicas y normativas que dificultaban la continuidad del jugador argentino Leo Messi en el Fútbol Club Barcelona.

Su pasión es el Real Madrid y casi todas sus retransmisiones van encaminadas a hablar sobre el Real Madrid y noticias vinculadas a dicho club, del cual es socio compromisario.

Es autor de dos libros sobre fútbol y el Real Madrid: «Que baje Dios y lo explique» y «Florentino. Viaje hacia el Real Madrid del siglo XXI» .

Actualmente está casado y creo que tiene 3 hijos. La verdad, no sé de dónde coño sacas el tiempo, Ramón.

Personalmente, he visto muchos de sus videos y comentarios y he de decir que se trata de un buen comunicador, inteligente y muy educado. Si algo he de resaltar, es que nunca pierde la compostura y educación, a pesar de participar en lo que actualmente se llaman «tertulias deportivas» y que no son más que un grupo de catetos analfabetos y maleducados haciendo salsa rosa con la actualidad deportiva. Siento deciros que el periodismo hace  tiempo que murió y el mayor ejemplo de todos sus pecados es actualmente, el periodismo deportivo. Pero bueno, esa es otra historia…

Antes de esta cagada, Ramón ya sufría en sus carnes el acoso de haters antimadridistas. Actualmente el anonimato que permiten las redes sociales hacen que aflore lo peor de cada uno, y ya os podéis imaginar la cantidad de improperios, insultos y faltas de respeto que inundan los comentarios que recibe diariamente el pobre Ramón de sus haters. Pues bien, el señor Ramón Álvarez de Mon SIEMPRE ha respondido a dichos comentarios con una notable educación, o sencillamente los ha ignorado. La misma reacción ha mostrado en las tertulias radiofónicas, siempre ha conservado el tono de voz, la compostura y la educación, lo cual es una rara avis dentro de esos aquelarres deportivos.

En estos tiempos que corren en los que cada vez hay menos cortesía, respeto y educación, hasta hablar de fútbol se ha convertido en una guerra en la que todo vale y nos olvidamos de que hay líneas rojas que no deberíamos de cruzar.

Ramón no es un pelamanillas, es una persona con dos carreras, socio de un bufete de abogados y que además se está abriendo paso con éxito en un sector corrompido hasta la médula con filtros que, al igual que en la política, no permiten llegar a primera línea a las personas honradas y con una gran ética personal y profesional. Sencillamente  Ramón ha cometido un error haciendo clic dónde no debía, o bien, tenía pensado limar los callos de la mano mientras se deleitaba viendo imágenes de la cantante Aitana Ocaña en su máximo explendor. Por cierto Ramón, ¡qué buen gusto tienes, cabroncete!

La verdad es que igual me da una cosa que la otra, incluso si Ramón fuera un zopenco o un botarate con menos luces que el salpicadero de un Seat Panda y hubiera estudiado la carrera del galgo, me daría igual. Ninguna persona merece ser humillada y sufrir la burla y el escarnio por este tipo de cosas y, mucho menos, motivadas por una simple rivalidad deportiva. No solo podemos estar haciendo mucho daño a una persona tanto a nivel personal  como profesional, se nos olvida que Ramón tiene una familia, una mujer y unos hijos que también van a sufrir las consecuencias. Espero que, al igual que Ramón, su mujer sea una persona equilibrada y tranquila, y que simplemente su respuesta sea dejarle sin cenar durante unas semanitas y activar a Ramón, en su ordenador, el control parental.

Y lo que más me repatea es que tanto el que se dedicó a ampliar el fotograma del video y contar a los cuatro vientos la búsqueda de la felicidad de Ramón, como los cachondos que se hartaron a burlarse con memes y comentarios, como los medios de comunicación que se hicieron eco del chismorreo, como un servidor… TODOS, repito, TODOS, nos pelamos el cacahuete en similares perspectivas a las de Ramón. Es decir, habló de putas, la tacones.

Por cierto, Ramón, si por un pequeño milagro, me estuvieras leyendo, recuerda, ni se te ocurra comprar entradas para llevar a tu mujer a un concierto de Aitana, mejor llévala a ver a Chayanne, hazme caso.

Aquiles Firma